Tronco de Navidad

Buscaba una receta para terminar la temporada de este año del blog y he pensado que nada mejor que un clásico de la Navidad: un tronco relleno de chocolate. El relleno podemos cambiarlo según nuestros gustos, crema, nata o lo que se nos ocurra. Realmente es más sencillo de lo que en un principio puede parecer, sólo basta con ponerse manos a la obra.

Comenzaremos encendiendo el horno a 180º grados para que vaya calentándose. Continuaremos separando las yemas de las claras de cinco huevos. En un bol pondremos las yemas junto a 80 gramos de azúcar y una cucharada de azúcar de vainilla, iremos batiendo hasta conseguir hasta integrar todos los ingredientes y obtener una mezcla cremosa. Será el momento de incorporar 95 gramos de harina junto a media cucharadita de levadura en polvo tamizadas, iremos removiendo poco a poco con una espátula de silicona hasta que se incorporen. En otro bol batiremos las claras a punto de nieve y también las incorporaremos a la mezcla final poco a poco. En la base de la bandeja del horno colocaremos un pliego de papel de horno 3D antiadherente de Albal y sobre este echaremos la masa extendiéndola con cuidado. El papel antiadherente de Albal da unos resultados muy buenos, la masa no se pega y el papel procede de bosques de cultivo responsable. Es ideal para hornear todo tipo de alimentos, se pueden preparar deliciosas recetas sin necesidad de añadir más grasa y sin que se pegue nada. No sé si os pasa, pero Albal es una de esas marcas que siempre he visto en casa, recuerdo de niño los bocadillos del colegio envueltos en papel de aluminio y luego en el colegio hacíamos una bola para jugar con ella. Ahora innovando con nuevos productos, haciéndonos que la tarea de meternos en la cocina sea siempre más fácil.

Mantendremos la masa en el horno entre 15 ó 20 minutos aproximadamente, hasta que comienze a tener un color más bien dorado. Minutos antes de sacar la masa puse en un bol en el microondas una tableta de chocolate para postres, en periodos de 2 minutos aproximadamente, hasta que se derritió. Cuando saqué el bizcocho del horno lo puse sobre el mármol de la cocina, volcando el contenido de la bandeja y retirando el papel antiadherente. Encima extendí con una espátula el chocolate. A continuación lo enrrollé sobre sí mismo y lo metí media hora en el frigorífico.

Mientras se enfriaba puse a calentar unos 200 ml de nata junto a otra tableta de chocolate troceada, a fuego muy lento, dando vueltas con una cuchara de madera. Esta fue la cobertura que utilicé para echar por encima al tronco. Primero di una capa, dejé enfriar un poco y di la segunda capa, con la ayuda de un tenedor rallé el chocolate para dar la forma de las vetas simulando el tronco del árbol y lo dejé ya enfriar en la nevera. Por último con la ayuda de un rallador le puse por encima un poco de chocolate blanco, y también otro poco en los dos extremos. Para adornar usé unas estrellas de chocolate que hice con moldes metálicos, echando el chocolate (este sin nata) fundido en los moldes y dejándolo enfriar en la nevera. También puse algún fruto rojo.

No me queda más que desear Feliz Navidad a tod@s los que hacen posible este blog, espero que el nuevo año 2013 llegue cargado de alegría para todo el mundo y que las cosas comiencen a ir un poco mejor. No perdamos la esperanza ni el optimismo, tengamos una actitud positiva que nos ayude a seguir adelante. Que sigamos aprendiendo cada día un poco más en la cocina y que compartamos todo aquello que pensemos que puede hacer feliz a los demás.

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Para la elaboración de esta receta he recibido muestras de la marca Albal a la que agradezco su colaboración