Pollo asado destino oficina

¿Quién no ha tenido alguna vez que cocinar en casa y luego llevarse la comida al trabajo? Recuerdo que de pequeño en casa mi madre tenía una cazuelita de aluminio con una tapaderita y unos ganchos que la cerraba para poder llevar alguna vez mi padre la comida cuando tenía un turno largo. Hoy los tiempos han cambiado mucho, por eso Albal nos propone una gama de productos y recipientes de gran calidad, para la conservación de alimentos. Pudiendo ir del congelador al microondas, pasando por la nevera. Comer fuera no tiene que ser sinónimo de comer mal o cualquier cosa. La idea de hoy es preparar la comida con antelación para cuando la necesitemos o disfrutarla en casa. Para ello usaremos cuatro pechugas de pollo cortadas a trozos, cuatro zanahorias, dos cebollas, sal, pimienta, un chorreoncito de vino (cada uno a su gusto que elija el que prefiera, yo utilicé fino de Jerez), un pimiento rojo, ocho patatitas, perejil picado, dos cabezas de ajo, un poco de aceite de oliva, una bolsa de asar para el horno Albal.

Encendemos el horno a 180 grados, para ir precalentándolo. Abriremos la bolsa de hornear y dentro colocaremos los trozos de pechuga de pollo salpimentados, las zanahorias peladas y cortadas en rodajas, la cebolla pelada y cortada en juliana, el chorreoncito de vino, el pimiento rojo cortado a tiras, las patatas peladas, las dos cabezas de ajo aplastadas y unas gotitas de aceite de oliva. Con la ayuda de unas tijeras cortaremos la esquina superior de la bolsa para que salga el aire y la colocaremos en la bandeja del horno. El tiempo ya sabéis que es aproximado, yo lo tuve unos 25 minutos, pero esto dependerá de cada horno. Una vez terminada la cocción sacaremos de la bolsa todos los ingredientes y ya tenemos el plato listo para comer o, como dije anteriormente, prepararlos en recipientes y congelar, dejar en la nevera o llevar a la oficina o donde quiera que trabajemos. Gracias a la bolsa de asar el horno quedó muy limpio y no tuve que perder tiempo en lavar ningún recipiente después. Y lo más importante: los alimentos conservan todo su sabor.

Albal nos ofrece una gama de productos muy amplia, como Las Bolsas de Congelación al Vacío Ziploc, Las Bolsas de Cocina al Vapor Microondas, el Papel de Aluminio o los Cubre-recipientes Elásticos que son una maravilla.

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Para la elaboración de esta receta he recibido muestras de la marca Albal a la que agradezco su colaboración